La resina del pino (cedro) es famosa por sus propiedades útiles y medicinales desde la antigüedad. Era popular en el Antiguo Egipto y, en el siglo XVI, se usaba ampliamente para tratar la peste. En la Antigua Grecia, la resina de pino se usaba En el caso de trastornos digestivos, también se utilizaba para tratar enfermedades de los riñones y los pulmones, reumatismos y mucho más. Y en la antigua China, era un remedio universal para casi todas las enfermedades, especialmente para los dolores de cabeza y de muelas.

En el pasado, muchos pueblos del mundo utilizaban la resina de pino para tratar incluso las enfermedades más graves, pero con el paso del tiempo y la difusión de los avances tecnológicos (es decir, los productos farmacéuticos modernos), se perdió el conocimiento sobre las propiedades curativas de este remedio natural único. Sin embargo, hay un lugar donde la resina de pino todavía se utiliza ampliamente con fines medicinales: Siberia.

La historia del uso de la resina siberiana en la medicina tradicional.

La resina de pino, que posee una increíble capacidad para curar heridas y regenerar células, se consideraba un producto muy valioso incluso antes de la llegada de los exploradores rusos a esta región. Los pueblos indígenas de Siberia y los Urales la utilizaban con éxito en el tratamiento de diversas enfermedades.

«Живица, живица, помоги исцелиться: от огня, от воды, от любой беды, от злобы, от сглазу и от всех хворей сразу».

Los curanderos siberianos, recogiendo resina , decían: “zhivitsa, zhivitsa, ayúdame a curarme: del fuego, del agua, de cualquier desgracia, de la ira, del mal de ojo y de todas las dolencias a la vez”. Después de todo, creían que esta resina absorbía toda la fuerza y ​​el poder del majestuoso árbol y ahora era capaz de curar.

Composición de resina de pino.

El remedio natural contiene entre un 30 y un 35 % de sustancias volátiles: trementina y sus derivados, compuestos oxigenados y ácido succínico. El resto (entre un 65 y un 70 %) está formado por ácidos resínicos y sus derivados, gomas y gomas de mascar (sustancias indiferentes), impurezas vegetales, vitaminas C y D.

La resina de pino tiene el máximo efecto curativo si no se extrae el árbol durante su cosecha. Se cree que si se daña un árbol, no dará la fuerza vital que puede dar. Por lo tanto, la recolección de resina se lleva a cabo solo de aquellos pinos que desprenden su propia resina.

Resina siberiana en la medicina moderna.

¡La tradición de curar con resina de pino sigue viva! Se utiliza en el tratamiento de:

• Sistema digestivo. Úlceras, gastritis, disbiosis, colitis: esta no es una lista completa de enfermedades del tracto gastrointestinal que se pueden curar con resina. Restablece el equilibrio normal en el estómago, mejora el funcionamiento del páncreas y del hígado.
• Sistema cardiovascular. El aceite de resina reduce la viscosidad sanguínea, fortalece las paredes de los vasos sanguíneos, normaliza la presión arterial y mejora el flujo venoso. Ayuda a combatir enfermedades como la angina de pecho, la taquicardia, las varices y la distonía vegetativo-vascular.
• Problemas de la piel. La resina del pino siberiano tiene muchas propiedades antisépticas. Puede tratar muchas afecciones de la piel: furúnculos, callos secos, acné, herpes, psoriasis, llagas y quemaduras. La curación de la piel con el tratamiento de resina se produce sin formación de cicatrices.
• Sistema endocrino. El ácido succínico, que se encuentra en la resina , ayuda a reducir el azúcar en sangre, lo que puede utilizarse en el tratamiento de la diabetes mellitus. También aporta enormes beneficios en el tratamiento de la glándula tiroides.

Esta no es una lista completa de lo que se puede curar gracias a las propiedades beneficiosas de la resina de pino . Los aceites y bálsamos a base de ella son una panacea para casi cualquier enfermedad. Pero, aun así, antes de utilizar cualquier preparado con resina, conviene consultar con el médico para evitar efectos secundarios inesperados.